MI AMANTE DE TODOS MIS SUEÑOS…
Mi amante perfecto de todas las noches y todos mis días...
mi amante que espero todas las noches, bajo mis sábanas de pasión,
eres un intruso velando mis sueños y descalzo camina por mi espalda,
y vas besando mis piernas largas con sus labios ardientes y apasionados,
y su piel sobre la mía descansa, y nos acurrucamos cruzando las piernas,
sus suspiros acaban en mis entrañas, yo sofoco sus besos en en mi boca,
para darnos respiración de boca a boca, y ser uno como lumbrera.
Hay fuego en la almohada, con deseos y sueños eróticos jugando,
a ser amantes todas las noches, y a mi vine a pasos lentos,
y va dejando la huella de sus zapatos en la entrada de la recamara
y sube muy lentamente, por entre mis piernas, para no hacer ruido.
Él es mi amante perfecto y mi amante de mis sueños tardíos y del ocaso
de mi vida, desde hace mucho sueño que hacemos el amor entre copas
de vino rosado y en abrazos ardientes llego sentir y su piel sobre mi piel,
y su boca bebe de la mía con fuego abrasador y ardemos los dos.
yo no hallo como apagar sus ganas de poseerme entre sus sueños
y los míos, y en sueños húmedos sentimos tenernos, amarnos,
El es mi amante prefecto, mi guía, mi maestro y mi confidente,
él es discreto y me deja sus besos ocultos por todo mi cuerpo y me abraza
y me seduce entre copas de besos y vino de amores y nos damos besos
de fuego y pasión de media noche, y me toma fotografías con arte,
es fotógrafo profesional, de revistas, me gusta que a ser mi juegue amante,
en realidad lo tengo en mis sueños y en mi vida donde lo vivo para mí.
Lo desee tanto, qué no lo pienso dejar ir nunca!!
Sé Que Tampoco Se Piensa Ir, Está Muy A Gusto Conmigo Y Sabe Muy Mío.
Porque Soy Diferente A Todas Las Que Conoce, Y Me Tiene En Sus Sueños
Todas Las Noches Y Me Envolverme En Sus Brazos Sabiéndose Mío,
Es Mi Amante Perfecto, Inolvidable, Implacable, Caliente Y Audaz Para
Atraparme En Sus Sueños Y Hacernos Uno Poseernos Abrazados Al Amor.
Siempre mío, siempre tuya... Eres Mi Amante De Todos Mis Sueños.
Alicia Pérez Hernández… México
No es la pluma la que escribe, es el alma
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