Lale Neda

ATRAVIESAN

 

Veo nubes livianas opacas

se levantan sobre el viejo aire

de la ciudad ya oxidada e infectada.

Desnudas encima serenas

están perfumando melancolía,

tienen ese tono blanco grisáceo

que adormece las ideas brillantes

 y el pensamiento queda estático,

aun así atraviesan mis cristales.

 

Veo árboles majestuosos

sus ramas fuertes  y gruesas

 clavados a la tierra están como fieras

 se contornean heroicos en reposo,

 en el tiempo han sobrevivido batallas

están vetustos y secos pero hermosos,

   arremolinan sus huellas con cuentos del pasado

no tienen hojas verdes ni esmeraldas,

aun así atraviesan mi savia

 

Veo un jardín donde no hay flores

se elevan tallos en soledad

aguardan llegue la primavera

y ambientar los sentidos con gracia,

    confían en que darán ánimo a lo sórdido

a esa fugaz tristeza que espera,

no hay ahora desfile de colores

ni ese espectáculo que alegra,

aun así atraviesa mis membranas.

 

Esa presencia que me satisface

de lo inarmónico, de lo incoloro,

esa sencillez invisible que saluda

  de lo no brotado, de lo desierto

esa serena espiración que se derrama

de ese gris que estremece

 que aguarda para transformarse

 y es ausente desconocido

atraviesa mi origen ciego.

 

Lale Neda