Dos bellas razones Me disté,
Para escribirte estas líneas,
Hiciste a mi mente volar,
Sin reservar aerolíneas.
Imaginé que eran mías,
Y mucho las disfrutaba,
Más pronto me percaté,
Que yo despierto soñaba.
Aunque no miré tú rostro,
Pues fué algo que me negaste,
Te confieso qué al principio,
Todito me alborotasté!
Más debo guardar respeto,
Y ser todo un caballero,
No dar pie a la lascivia,
Pues hondo es ese agujero.
Te agradezco ese regalo,
Y el tener tan lindo gesto,
Gracias por dejarme verlas,
Para eso te escribo esto.