Cincuenta y tantos no son sesenta
Así como la luz del alba
No es claridad absoluta
O en los sueños....
El agua no siempre es diáfana.
O como de los ayeres
Que no son memorias olvidadas
Al contrario carne viva
En amorosa herida entrañada.
La noche más oscura
No siempre es eterna
Algunas veces....
Gratamente nos sorprenden
Las estrellas que iluminan
Nuestro cielo en la distancia.
Del tiempo; el presente
Es el camino más sincero
Puesto que paso a paso...
Lo recorremos con certeza.
No como el futuro; incierto y lejano
difuso en el transcurso, etéreo.
El día de hoy es el más importante
El mañana está muy distante
El ayer; el ayer ya no tiene remedio
Y cincuenta y tantos, no son sesenta.
Martha patricia-Arauca-2021