Encarcelada en las estrofas
del melifluo poema de tus besos,
corifeos me cuentan cosas
que en el apuro del amor no veo;
tengo en el vientre mariposas
y me deleito en tu deseo.
El crucigrama de tu cuerpo
y ese tu toque varonil
para abordarme con sutil
ternura cuando zarpo
hacia tu mar con mi candil,
hasta que ves el aleteo
de dos palomas en mi pecho
y como el mártir Prometeo
entras al lecho y me despojas
de mi más mítico trofeo
mientras susurras las estrofas
de miel en el poema de tus besos.
LNT©®VanessaTawer
26-09-2021