La vida debemos vivirla
con dedicación y valor,
porque no es amarga
y tiene un raro sabor.
Cuando vivimos la vida
intentando cambiarla,
eso es un gran error
no podemos controlarla.
La vida es muy compleja
y de corta duración,
muchas veces estamos alegres
otras con gran depresión.
La vida nos da sorpresas
alegrías y mucho dolor,
por eso nunca sabemos
si la vida tiene sabor.
La vida tiene sus contrastes
y en ella se aprende mucho
y cuando ya somos viejos
uno se siente muy ducho.
Solo es posible vivir una vez
pero muchos creen con devoción,
que pudiéramos regresar
en una reencarnación.
Autor: Alejandro Díaz Quero
Villa de Cura,13/09/2021.