Es un canto de alegría,
de una suprema pasión,
de una honesta ilusión
que forjas tú vida mía;
una celeste armonía
que nace del corazón
que surge de la obsesión
de amarte día con día;
es un himno de ternura,
un arpegio celestial
para el alma más pura;
eres amor ideal,
eres razón y locura
de un sentimiento inmortal...