Los años pasan y dejan su simiente
dudas, recuerdos, promesas sin cumplir
éxitos vanos perdidos en el tiempo
fatuos amores y noches sin dormir,
sueños que vagan perdidos en el limbo
amaneceres sin ver la luz del sol,
fríos inviernos que hielan la esperanza
ígneos veranos, sequia y desamor
Pero también nos dejaron la ternura
la paz, los hijos, los nietos, la ilusión
de que el mañana empieza en un instante
de que el futuro está en tu corazón,
de no hay nada ni nadie que te eclipse
si plantas cara al destino y al dolor.
Abre los ojos, despierta cada día
con la ilusión de la aurora juvenil
con el canto frutal de los gorriones
con el rocio bañando tu jardín
con el calor de tu lecho compartido
con un proyecto, un poema que escribir
con un retrato pintado en tus espejos
con un abrazo y un sueño que vivir