Arrabal ñero, frijolero
prolífero sin duda,
abundante obrero.
Arrabal, difunto de dinero,
el grueso, el montón, de tez marrón,
de las clases sotanero.
Arrabal falto de educación,
comer es lo primero,
principio no Carreño.
Aquí precariedad en fasto,
pues su Dios exacto
le dio el cielo en pacto.
Aquí sin oro que brilla,
pero en paz tranquilo
come su tortilla.
Aquí el milagro abunda,
por la fe creyente
para un Dios que inunda.
Arrabal ñero, frijolero;
en tu gran pobreza
de Dios el primero.
Lic. Isaías González Arroyo