Antonio Miguel Reyes

La rosa se marchita (soneto)

 

La rosa se marchita

 

Rosa que al viento culpas de torpeza
no quitas ni escatimas tu dulzura
y muestras tu fragancia con mesura
en visos que dan toque a tu belleza.

 

Solo pides custodia a tu pureza
reclamas a la brisa más ternura
que quieres  tu metáfora más pura
y tu imagen mantenga su entereza.

 

No es Céfiro convicto de tu muerte
ni puedes reprocharle que haya sido
quien rompa con su roce tu vestido.

 

Pues solo piensa que él ha pretendido
en cumplir con la regla del más fuerte
siendo el tiempo el culpable de tu muerte.