Retirado disfruto de la vida,
en la calma de un idílico hogar,
es una pausa leve y requerida
donde al fin pueda mucho disfrutar;
ante una peste ruda y homicida,
donde no nos podemos descuidar,
se puede acelerar una salida
ya que podemos todos contagiar;
aprovecho mejor esta fortuna
de contar con mi querida familia
que con mucha atención siempre procura
brindarme ayuda eficaz y oportuna;
dulce huerto que armoniza y concilia
todo con amor, cariño y ternura...