De tu tierra castellana tú eras la princesa de mi alma,
aquellas noches de primavera,
yo presumía de tu amor que tú me amabas,
aquellos ojos llenos de amor que me enamoraban.
Nunca habrá olvido de las noches de lunas
de tu tierra noble soriana,
de una muchachita amor me daba.
No habrá olvido de aquellos ojos,
que en las noches más que las estrellas brillaban,
de aquellas noches castellanas.
Ahora miro al cielo con los ojos llenos de lágrimas,
mirando las noches de tu tierra soriana.