santoro

El Reino de Assibar (Saga para Jóvenes)

 


Akhatar voló hasta la cúspide de la montaña,
y parado divisó el hermoso Valle de Saffir.
Los abedules se contorneaban insinuantes
buscando atraer las madreselvas para que
se les treparan y los engalanaran con
sus hermosas flores.

Los canarios, sinsontes y ruiseñores 
entonaban un dulce serenata
que el Valle repetía con su eco voluptuoso.

Cuando vio que Assibar se acercaba
a la laguna, desnudándose y dejando sus tules
y alas en la orilla, pensó volar hacia ella.

Pero, en ese instante, se acercó Akeleth, 
quien despojándose
de sus vestimentas y poniendo sus alas en una roca
se sumergió en las cristalinas aguas,
se aproximó a Saffir, la abrazó, 
la besó apasionado
y la poseyó formando con sus movimientos una gran
ola que se extendió por el Valle formando el caudaloso
Rio Amannat en el que quien se sumerja en él recibe 
el bautizo de la Ondina con el que asegura su prosperidad.

Akhatar, enfurecido por los celos, se desagarró las alas
se lanzó al vacío, y así nació el famoso abismo de Kalith
en donde los despechados van a enterrar sus ilusiones.

(Continuará)

 

*Imágen bajada de Internet

 

©Saul Sánchez Toro
Villahada
Villamaría, Caldas, Colombia
Enero de 2019