Rebeca Cortez RECH

Lléname de tu sonrisa

Una sonrisa de tu boca puede causar magia en mi pecho. 

¿Acaso querrás quedarte por siempre?
¿O arrebatarás de mí el placer de disfrutarte?

Que las estrellas se alineen y ocurra lo esperado por mí, 
lo inesperado por vos.
Y tomes de mi el jugoso néctar de mis besos y te envenenes de dicha y placeres extasiantes.

Muerde la fruta que he dejado escondido en tu pecho,
llena de dicha mi vida, 
pero sobretodo la tuya amado mío. 

Desliza tu piel hacia mi lecho 
y tómame tuya eternamente. 
No observes el tiempo.
Olvida las reglas masculinas impuestas por la suciedad de la espantosa rutina de la vida. 

Arráncame el Alma y dame la tuya a cambio. 
Rómpeme el vestido, más no mi pecho.
Llena de tu olor mi pelo, 
Llena de besos mi cuerpo,
sonríe ahora y todo brillará para mí. 

No resistas a mis manos, 
no huyas del encuentro 
y la fusión por miedo a fracasar.
Rodéate el pensamiento de mi mirar,
De deseos,
De amor
Y de eternos besos. 

Quédate,
no te acobardes ante la letanía del pasado,
y vibra para mí.
Por mí eternamente. 
No pongas fecha de caducidad a lo que no tiene tiempo.

RECH