Pasan las horas
Y yo no puedo conciliar el sueño
Llena de ansiedad y miedo
De saber si él me amara de nuevo
Es como una luz que me mantiene despierta
El deslumbra y resplandece
El brilla en un mundo lleno de fealdad
Me pregunto si él aún piensa en mi
El importa cuando todo pierde el sentido
Tres de la mañana y no puedo dormir
Pensando en él y en su cálido ser
Tres con diez de la mañana
Y ahora pienso en su risa
Su forma de arrugar la nariz
Y sacar los dientes cuando ríe
Tres con veinte de la mañana
El llanto llega
Desearía haberme despedido de el
Darle un último beso
Tres con treinta de la mañana
Recuerdos me inundan sin parar
La forma en la que me decía te amo
Sus chistes y su sentido del humor
La manera en que me miraba a los ojos
Tres con cuarenta de la mañana
Empiezan a llegar las preguntas
¿Estará comiendo bien ?
¿Como la estará pasando ?
¿Me odia ? ¿Me ama ?
¿Ya me habrá olvidado ?
¿Él podrá dormir ?
Y cuando por fin logro descansar
Su fantasma se aparece en mis sueños
Diciéndome todo lo que quiero oír de el
Estando otra vez a su lado
Viendo sus hermosos ojos negros
Admirando como arruga su nariz
Diciéndome que me ama y que pronto nos veremos
Pero no tengo tanta suerte
Tengo que despertar
Y tengo que volver a la realidad
Volver a la misma ansiedad
Y al mismo miedo de que no lo volveré a ver
A esta tristeza tan profunda que siento Volver a esta peña tan grande que siento
Solo me queda acostumbrarme a un mundo sin amor