soy un gorrion herido que agoniza en el suelo.
tu eres ese regazo tibio,
el cual me acuna en este dolor siniestro.
tu calor es dulce como la miel pura.
tus caricias, un balsamo que mis heridas cura.
soy un gorrion herido, casi moribundo.
tu, un angel protector enviado del cielo
para ayudarme a vivir en esta vida sin vida.
mis ansias por vivir son enormes, pero tu ternura infinita
es mas grande que el oceano, y mas profunda que el mar.