Antes que morfeo te dome
Quiero dejarte caricias
Que te obsequien lindo sueño.
Deja que en ti me acomode,
Siente la diestra y siniestra
Ascendiendo por tus piernas
Suavemente, dejando caricias tiernas.
Pasando por tus rodillas
En caricias circulares,
Alpinista de tus muslos
Hacia puntos celestiales,
Acompañan mis labiales
La destreza de mis dedos,
Y así, entre caricia y beso
Y apretones deleitables,
Empiezan los guturales
A evidenciar la pasión.
Me detengo ante tu puerta,
Toco el timbre superior
Con mi falange insistente,
Y siento que te estremeces
De los pies a la cabeza,
Mi lengua toca esa pieza
Donde empiezan los ardores,
Y no hay caricias mejores
Que derrumben voluntades,
Como aquellas que trasculcan
Los tesoros interiores.
Si mi boca hace escala,
Mis manos siguen su curso
Pasando por tus caderas,
Quieren alcanzar tus montes
Circundando sus laderas,
Hasta alcanzar esos puntos
Marca de alturas mayores.
Mis dedos muy juguetones
Los aprietan suavemente,
Ellos no son egoístas
Y atraen los labios golosos
Quieren compartir el gozo
De apretar esas aristas,
Mi lengua sin mucha prisa
Degusta su madurez,
Cual duraznos los disfruta
En su total desnudez,
Mientras en la planta baja
En gala de tozudez,
Va traspasando la puerta
Erguido a más no poder,
Aquel que orgasmos reclama
Como respuesta al placer,
Va y viene mientras llama
En idioma indescifrable
La lluvia que ha de mojarle
Su testa, ojos y sien.
Hay temblores que rebasan
Los límites peligrosos,
Réplicas hay en decenas,
Luego voces en silencio
Van acallando la queja
De la invasión permitida,
Dos miradas que se cruzan,
Manos que fieles se enlazan,
Sonrisas que se regalan
Y mil promesas guardadas
Por fin hallan la salida.
( VOZ DE TRUENO )