Este mundo no es terrenal
pues, unas nubes arracimadas
transforman en suaves brazadas
hasta acariciarme como animal
No estoy en planeta tierra
pues, estoy a cien años luz
de distancia en el tragaluz,
no podré volver, se cierra.
Desciendo a la superficie, salada
de pestilentes reptiles, plagada
que muerden la piedra salada.
Anémonas, traspasan la helada.
Luz rojiza de destellos azules
en paisaje de horrores velados
sin sangre, sin restos malvados,
resquebraja el suelo, brillan las inquietudes.