A los poetas
Tu sino es el legado de los dioses que te otorgan el poder de hundir tus manos en fangosas aguas
y extraer de la mediocridad y dolor del barro gran tesoro que es tu gema preferida
Es tu tesoro el haber sido elegido para atravesar los portales de esta realidad a veces lacónica , otras demasiado lógica
Que daña el vivir del soñador, del creador
Que ensueña mundos sutiles y mejores
Donde habiten sus pasiones
Elaboras dorada trenza de oro bañada que son las palabras que tu alma teje y forja
Idílico pasaje desde tu alma a tus versos
En que un ángel se llena de brillo de fulgor con alas de dulce candor
Cuando de alegría tu emoción se vista es tu cantar ligero y travieso como una brisa
Que va de prisa por ello corres a atraparla
Y así de tu alegría se hacen cómplices las aves con su trinar
Sí, ¡hemos de festejar!
Somos poetas
Y vivimos al cantar
Y despertar al hombre de su pesada densidad
Acompañennos en el viaje
¡Volaremos todos juntos y seremos muchos más!
Virginia Viera Pereyra
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