Insiste el mal trago,
la soledad,
el vicio
en apoderarse
de todas mis funciones.
Quiero irme ya
para siempre ahora,
no volver jamás
a pisar el sucio suelo;
pero a cada momento
siento que no puedo:
algo me frena
al borde...
Todo el cariño
por un agujero
se va lento yendo.