Que destino tan cruel
Tu madre al perecer,
Has sido tú,
Trofeo de ese acto cruel.
Salvaje corazón,
presa del terror
No entendía
lo que acontecía,
solo meses, el tenia…
Sus ojos vivaces
Ya no verán el follaje
De las tardes salvajes…
Mercancía con un precio,
Te quitaron lo que
Era tuyo por derecho,
Tu libertad y tú lastimero
Cantar a lo lejos…
Ahora…
Te tengo…
y ese, fue el precio?
Monito…
No te merezco…