Pyck05

ERA TU VOZ...

Era tu voz
tan dulce y melodiosa
que enamoraba.

Me cautivó
el canto de tus labios
aquella tarde.

Y hasta soñé
con ratos y momentos
que no existieron.

En ellos tú
venías a mi lado
con tu sonrisa.

Y en ese instante,
vivimos muy felices
sin darnos cuenta.

¡Bendita infancia,
de nuevo rescatada,
con estos sueños!

Y me quedó
el timbre de tu voz
en los oídos.

También con él
dejaste mil caricias
que eran sinceras.

Y me dormí
contigo, en este sueño,
sin un suspiro.

Rafael Sánchez Ortega ©
15/06/21