emiliodom

El estrés positivo

  La relajación está sobrevalorada. Con frecuencia, identificamos la plenitud con la imagen que transmite la publicidad de los complejos vacacionales: una persona tumbada en una hamaca al sol, sin hacer nada. Sin embargo, fuera de las pausas necesarias para recuperar fuerzas, antes de regresar a la actividad, la inacción y la falta de tensión, son más perjudiciales para la salud psicológica y existencial que el estrés positivo. Así como un músculo que no se ejercita termina atrofiándose, las personas que no se marcan objetivos vitales, son presa fácil de la apatía y el miedo. De tanto rebajar el nivel de la exiatencia, cada vez se atreven a menos, mientras la autoestima y la confianza en las propias posibilidades van decayendo.