En tu lecho.
En tu lecho desfallezco
en medio de ese océano
tan terrible y profundo
me sumerjo en el olvido.
En tu lecho desaparezco
y me lanzo al vacío
del abismo triste y oscuro
sin salida ni fondo.
En tu lecho yo sueño
perecer algún día
y contemplar tu rostro
en la sobriedad de la luna.
En tu lecho yo muero
por estar solos un momento
y desaparecer en el augurio
de tu semblante sereno.
En tu lecho yo amo
lo pagano y lo prohibido,
lo hermoso y lo trágico
de este sublime martirio.
En tu lecho yo navego
a bordo en tu velero
que está lleno de misterios
apasionados e inadvertidos.