A mi hija en su cumpleaños 12
Llorando y riendo válgome dichoso
Volteando la mirada a donde hube
De levantar tu cuerpo piel de nube
La tarde del septiembre más hermoso
Y fui creciendo fuerte cual frondoso
Árbol que da sombra a la que acudes
Cuando el remanso de mis juventudes
Logró por ti las fuerzas de un coloso
No se si es la tristeza o la alegría
Lo que me invade al verte floreciendo
Si dando a una doncella bienvenidas
Es de tu infancia estarme despidiendo
Mujer o niña, te seguiré queriendo
Hasta el ocaso lento de mi vida
Gerardo Villalobos