La vi bonita y serena....
su perfume es hierbabuena...
rayos de luz desprendía.
Los mismos que cada día...
exhiben la claridad...
pudientes de libertad.
Encandiló mis ojitos...
al ver los suyos bonitos...
hermosos como un rosal.
Tersa, de fina figura...
la más lozana criatura...
que nadie puede soñar.
Angelical su belleza...
damisela con grandeza...
postrada sobre un altar.
Es mi canto a la mujer...
la que comparte mi ser...
y su amor me supo dar.
Va para ti vida mía...
por tan grata compañía...
y darme ese bienestar.