Es un noble caballero
de miradas penetrantes.
Ojos verdes, elegantes,
con el corazón sincero.
Trabajando como obrero
en labores desafiantes,
es un noble caballero
de miradas penetrantes.
Y en mis versos le reitero
con palabras confesantes
porque de verdad portantes,
como luz de aquel lucero,
es un noble caballero.
Y su mano solidaria
va entregando su ternura,
el amor en él perdura,
como condición primaria.
No precisa de plegaria
la bondad es su natura
y su mano solidaria
va entregando su ternura.
Y en la noche solitaria
nunca pierde la cordura
su mirada es siempre pura
con el alma voluntaria
y su mano solidaria.
Se le fue la primavera
pero sigue caminando
solidario sigue dando
como dio la vez primera.
Va dejando por la vera
el amor que va regando
se le fue la primavera
pero sigue caminando.
¡Nunca espera lo que espera,
ah, los años van pasando…!
hoy lo estamos festejando
y, a la luz de una lumbrera,
se le fue la primavera.