Su mirada, su risa lo perdi, ahora nose que hacer sin ella, no supe quererla, en qué lugar andara sin mi, quizás me olvido, como el sol que olvida a la luna cada noche.
Se fue, quisas a un me extraña y no lo sé
cada palabra de sus labios, que se grababa en el watsap, me mata está agonía de no tenerla junto a mi.
El recuerdo de su suave voz, me pega en el alma, no le pude decir adiós, yo no sé si algún día perdone mi arrogancia, la sigo queriendo en silencio, pero ella no lo sabrá.
Me hubiera gustado, algún día no escribir
estos versos, ahora se que no la comprendí en algún lugar alguien la amara y mi corazón aquí gris, morira sin su amor.
Autor: Franco Montesco.