Abro la puerta cerrada frente a mi, miro a mi alrededor como buscando una sombra que no vi, la sombra del olvido que vive en mi.
Canta un pájaro sobre la rama inclinada, llena de hojas disecadas como mi corazón sumido en llamarada.
La luz del sol que en las mañanas alumbra, es como el despertar de mi alma acongojada mirando a lo lejos mi vida encerrada sin rumbo de de salida ni llegada.
Eh aquí postrado en mi aposento, cual sombra cual viento que sobre mis sienes se fijan en mi laberinto sin salida y ya sin aliento.
Donde estas? Le pregunto al silencio cual respuesta se la lleva el viento, igual como se lleva mi juventud el tiempo.
Porque sigo aquí? Le pregunto a mi conciencia porque atado aqui me encuentro? No escucho la respuesta, la conciencia es sorda solo escucho un lastimero lamento.
Lauro B.