Una quimera es olvidarte deseo no desearte más sueño ya no soñarte por las noches, anhelo el momento en que no llore como niño por tu beso tibio que ya no está o por tus ojos verdes que me miraban con amor y allí yo me perdía y me olvidaba de todo, o el encuentro mágico con tu cuello aunque esto sea un simple preludio para luego bajar a tu pecho y quedarme ahí quieto deseando que el efímero momento sea eterno que el tiempo se detuviese y quedarme viviendo a tu lado eternamente hasta que los pajaros dejen de cantar hasta que el sol se apague.