alexy.alvarez

Cadenas

¿Dónde empiezan las cadenas?

Atrapada, sin rumbo

miro al suelo y a las estrellas

y me miran, me lanzan un cumplido

con su luz al destellar.



Me levanto, cierro los ojos

y me estiro para alcanzar

un poco de realidad sabor a sueños,

hasta que empiezo a tropezar.

Caigo y frunzo el ceño

Al ver cadenas que me impiden caminar.

 

 

Entre confundida y decepcionada,

empiezo a palpar el extremo atado a mí

hasta llegar al final de la cadena.

¿Qué hay aquí?

Son raíces y espinas

mantenidas desde siempre ahí,

esperando a ser encontradas

y reconocidas por mí.

 

 

Entre miedo, confusión y llanto

las toco, me lastiman y me atraviesan.

El dolor me consume, admito.

¿Cuántos días más de dolor me esperan?

 

 

De pronto, el dolor me fusiona

y aunque lo desconozco, me pertenece,

así que confío y me atrapa,

se queda, reposa y luego decrece

y me libera, cual prisionera

y lo atesoro, como aprendizaje.