Dime qué no pretendes que soy ella quién te besa cuando despiertas,
Que ya no piensas que es ella quien toca tu puerta cuando llego de sorpresa,
Dime qué ya no piensas en ella...
Tus ojos aún brillan cuando dices su nombre
¿Es mentira o por qué tú mirada escondes?
¡Y si no es así mírame a la cara entonces!
Tu aún piensas en ella,
Y por las noches te rompes
Porque su nombre susurras pero no te responde.
Y entonces recuerdas que ella ya no volverá a casa, sólo soy yo a la que encuentras en la cama y no a quien tu tanto deseabas.