De mi pensamiento surge la penosa idea
la luz divina que me da el amor,
que aún estando lleno de conocimiento
siento que me falta más del creador;
porque tan hábilmente el amor me llega
que siento que a veces me abandona,
solo el espíritu de Dios me llena:
ese gran amor que vive en mí y razona.
Ni por más que yo hago el esfuerzo
siento que no tiene ningún valor,
y así vivo la vida sin curarme creyendo
que me hace falta más del creador;
y cuando alzó los ojos exclamó y rezo
diciendo que me hace falta señor,
si todo lo sé y a través de ti todo lo veo
será que me hace falta más amor?...