Vuelven las prisas,
las almas se impacientan.
Falta la calma.
No es una rima,
es algo que le ocurre
a las personas.
Frases precisas
que suenan dolorosas
pero reales.
Se va la vida,
igual que los veranos
quedan atrás.
En los otoños
se inquietan las personas
y con razón.
Es un instante
y así, sin darse cuenta,
llega el invierno.
Y en él estamos,
tratando de esquivarle,
sin ser posible.
Pero vivamos
sus días plenamente,
hora tras hora.
Tenemos cerca
la meta y el destino
que vimos lejos.
Rafael Sánchez Ortega ©
29/07/21