Amanece en mi alma cercana a estallar
en estas palabras que no sé de dónde salen
si no es de un fondo abisal
que habita en mí adentro
y donde respiro yo solo contigo a mi lado
si es eso posible y no mucho imagino
en un desvarío del sentido que me falta
aún a estas alturas de la soledad sin medida
donde vago yo a oscuras por un desierto
de gris ceniza buscando una luz
que realmente ilumine todo calcinado
en mi ánimo fúnebre
mientras las horas no pasen
conmigo ya solo deseando la muerte
y vida eterna tan solo para estos poemas
en que congelo mis ansias salvajes
de animal callejero que anda en sí a rastras
sin encontrarse un sendero que lo lleve
más lejos sin saber de qué escapa
si ve en el espejo el rostro de un héroe
ancestral que da más miedo que nadie
y bien que no se lo tapa
para no cancelar el hechizo
que lo mantiene a la espera
de aquella muchacha tan guapa
que lo despierte y lo traiga de nuevo a la vida
real...