Regalo a mis ojos el perfume de las flores
Preparando el viaje que me llevará a tu presencia
Regalo a mis ojos la inmensidad de la noche
Para encontrar en tu lecho la quietud de la estrella
Desarropándote inocente de tus trajes ardientes
Adormecido en el mar de tu seno y tus sueños
Donde se ahoga mi luna en la inmensidad del silencio
Y mi océano se entrega a tu costa en espuma
Regalo a mis ojos tu figura en la nube
Escondida en la esfera arrullando al cielo
Descubriendo horizontes de pasión y de entregas
Cuando la mirada es caricia y la piel una hoguera
Me regalas tu boca encubriendo mis labios
Como riachuelo que nace en la virginal montaña
Inundando mi alma de tu sustancia y tu savia
Germinando el latido con tu cabeza en mi pecho
Antes de que el viento resople en las olas
Olvidando su orgullo, inquietando el océano
Y su voz indomable se convierta en murmullo
Nos regalamos el vuelo de un amor en sosiego
De una noche sin sombras y un gemir sin palabras