De amable gesto, tal vez
Infrecuente en estos días,
Cuando se ve, al parecer,
Cómo se toma la vida,
A punto de perecer
A golpes por una miga
Y la miseria se muestra
Con toda su crudeza
En el paisaje urbano
Por un trago de cerveza,
Y por ganarte de mano
Y tener una moneda.
.
Y en el grito destemplado
De los hombres olvidados.
Pidiendo en los semáforos,
Durmiendo entre cartones.
Y el temor de ser golpeados
Por infames escuadrones.
De amable gesto, tal vez
Infrecuente en estos días.
Su mirada, la de un niño,
Y su dolor tan de hombre.
Apenas perceptible
En el fondo de sus ojos.
Una pena oscura y simple
Brillando en sus pupilas.
Alguien dijo que no se fue,
Sin dudar de su cordura,
Le parece haberlo visto
Como soñando la luna,
En el piso de arriba
Caminando pensativo,
O sentado en una silla.
Como buscando el olvido.
Alguna vez, no lo se,
No se si acaso se ha ido