Si dijeran que salga del techo de la lluvia
para anidar tu nombre
que afuera flota el sol en los andenes del viento
sin el brillo de tus ojos
y que es posible
si dijeran que oiga el salmo de las sombras
cuando pasa volando una paloma gris.
Si encontrara la fuente del color de tus besos
y la casa del sol no tuviese puertas
si los muros del silencio derrumbaran
los ópalos del frío para siempre
y la sombra de los recuerdos fuera un germen
de luz.
Si el silencio dejara atrás su aleteo
y otra vez más unas manos
ya no estuviesen caídas ni pensativas ni solas.
Si anduviese la sombra de Dios en la avenida
y olvidara que el hombre fabrica fantasías
y fuese verdad Su sonrisa
y perdurables las aguas en los ojos con sed.
Si pudiese algún día entreabrir aquella puerta
y cosechar cristales encendidos
¿qué sería de estos callejones sin salida?
¿qué sería finalmente de tu ausencia?