Son tres tristes versos
que nacen del corazón
anhelando tu regreso
a tu vil desamor.
Olvidando tus desvelos
ante tu osadía y traición
porque nada en ti valía;
sólo penas persuadían
en esta oscura soledad que
pintaba sentimientos
sobre las alas del mar.
Mientras una despedida
se preparaba para volar;
y el lazo que nos unía
lentamente se rompía
porque que triste es amar
en la lejanía de tu tiranía.
Y un adiós corría y una rosa florecía
y una vez te amé
se desvanecía...