Si tú supieras cuánto te pienso
en las noches muy llenas de estrellas,
titilando cada vez más bellas
en el cielo, como un lienzo inmenso.
Cada noche, me quedo en suspenso,
dibujándote cuando centellas.
Si tú supieras cuánto te pienso
en las noches muy llenas de estrellas.
Y aquí en mi pecho el amor condenso
con tus miradas, con tus querellas.
¿Y por qué tu luz ya no destellas,
como la luna en el cielo extenso…?
¡Si tú supieras cuánto te pienso!