Bolívar Delgado Arce

NECIO

Te admiro por tu fuerza

por tu soportar a tanto golpe

y salido airoso en mil batallas,

a veces, con tu soledad, tu solo brío

a veces ardiente,

en otras discriminador o frío.

En ocasiones te exigí que no lo hicieras

que tu empeño era

insostenible, improbable, imposible,

y pudiste contradecir y demostrar

mi equivocación o cobardía,

que lograste esposar algunos sueños

o que fuiste flechado

con dardos de espuma y pétalos

por ojos, sonrisas y colores;

y encadenado, venciste ufano,

y aunque sufriste-sufrimos los dos

continuaste en mi pecho, palpitante

¡admirablemente adelante!;

pero no me digas que jamás

te has gravemente equivocado,

eso te pasa, corazón, por necio.

 

        Bolívar Delgado Arce