Adelaine Soto Alvarez

DESPERTAR PESADUMBROSO

 

Despierto
sin saber si existo aun
siento el griterío de los zombis
mirando al cielo
más encapotado que nunca
Las cruces clavadas en cada puerta
el llanto de los ancianos y los niños
y el pesad umbroso aire
más contaminado que nunca
de bacterias atómicas
Las maniguetas del reloj
giran desesperadas
pierdo a amigos y desconocidos
todos entubados hasta la médula
cubiertos por una soledad que no termina
Ni termina el llanto
en cada hoja
ni termina la zozobra
y el hambre
Noticias de pasillo
otras de lengua a lengua
Que si las células de los fetos
Que si el hígado de los linchados
Que si la cremación en bultos
Ya no sé qué hacer con tantos comentarios
reales e ilícitos
pero ahí
clavados como saeta
Yo que hui de los bramidos
más tempestuosos
después de enfrentarme
a leguleyos y payasos
y quebrar mis manos
al hierro fundido
Yo que vi caer a mis hermanos
ahogarse con el moho podrido
de las humedades carcelarias
Llegar aferrada a la verdad
seguir aferrada a la verdad
al extremo de casi perder el aliento
aferrada a la verdad
Hasta un día insípido
donde cayó la venda
y me vi fuera de los condecorados
aplastada
demolida
en medio de una oscuridad
tenebrosa
llena de cursilería
pero a la moda
Hoy arrastro mi mantón de fracasos
y burlas en pleno rostro
Gente que silba
y nadie los escucha
Otros que no gritan
pero llevan la marca
que a mí no me pusieron
Metida a tiempo completo
en una casucha
de una barriada de pólvora
y silencio
de miedo insalvable
Detrás de un teclado
que no para
de lanzar salvoconductos
y verdades
que nadie lee
que nadie escucha
Para al final
ovillarme balbuceante
con la indecisión
de sí habrá luz
al otro día.