rosamaritza

(1)...

Entre la brisa las hojas volaban dispersas, mientras una ráfaga de viento las llevo a un callejón, 
solo el silbido rompió el silencio.

Después del vendaval regresa la calma, se levanto de la cama y se asomó a la ventana, 
y entonces lo vio en el callejón, salió todavía en pijamas, y mientras recogía hoja por hoja, 
recordó haber dejado el libro en el borde de la ventana.

Mientras en la cocina camina descalza, con una taza de café humeante entre sus labios, 
cree haber escuchado en el callejón ladridos y ronroneos, 
entonces fija su mirada a las hojas del libro sobre la mesa, y  prestando toda su atención a un leve susurro, 
pensó en la primera vez que un murmullo de almas y su imaginación entran en escena.

 

Y la vida continúa...