Antonio Miguel Reyes

Castigo

 

Castigo

 

 Castigo que mis ojos pagan días

Días si, reviviendo mi castigo

 frías gotas de pena y tu conmigo

y contigo, lloré esas gotas frías.

 

Maldigo todo el tiempo que sufrías

sufrías y llorabas, lo maldigo

teñías con tus lágrimas el trigo

trigo impregno, que tú siempre teñías.

 

Teñías si, con pésima costumbre

costumbre que debemos olvidar

olvidar y partamos a la cumbre.

 

Cumbre que borra todo ese pesar

pesar que con las llamas de esa lumbre

alumbre mi camino en el versar.