Se fue el amor
se secó en un desierto infernal
no hubo tiempo para echarle capa,
se murió como un errante malherido.
Solía ser aquel amor
pionero de todas las historias,
admirable, con los pies dispuesto
a dejar huellas en el sequedad,
aunque amar era prohibido.
Buscó un rincón en tu pecho,
esperanzado de encontrar allí,
el cobijo que protegiera su piel
eternamente y para siempre.
Se fue el amor
y con él se fue el invierno,
solo hubo en su colección
tus fotografías y la canción
que escuchamos juntos
en el estrellado anochecer
de un agitado noviembre.
hay cuanto me duele,
cuanto duele partir,
con mis pantalones rotos,
entre esta árida pasantía,
arrastrando mi esperanza
de volver a ver (a ti) un día
y sonreírte, de nuevo,
y eso sí, si llego vivo
porque fue tan bonito
los sueños primaverales,
pero tan corto el sueño.
Autor: Alex Gramt