Mo Anam Cara

A mi padre ( Poema Recitado)

 

Los días han caminado deprisa sin ti a mi lado

apresurando sus pasos por las calles de mis melancolías.

El viento ha golpeado fuerte al corazón

dejando un rastro de carreteras polvorientas tras de sí.

Ha vuelto a llover en esta noche fría y sombría

sin un abrazo, sin un consuelo, 

sin ese instante que me devolviese la ternura de tus besos.

Ha llovido y sigue lloviendo en las inhóspitas aceras de mi sentir

mientras espero ansiosa una palabra, un abrazo, un te quiero.

 

Está amaneciendo tras los retazos rotos de este pensamiento

que me arrastra, que me lleva a la memoria de aquella gloria

y es que esos dulces recuerdos desarma profundo mis huesos,

los aprisiona  y los vuelve a liberar…

Y en ese descuido de sentimientos vuelvo a brillar 

como estrella radiante, como estrella fugaz,

como aquella estrella que una vez fue la niña de tu hogar…

 

Y sobre el cristal mojado las gotas de lluvia se resbalan

y caen al suelo vencidas

empañando la vida con sus viejas y añoradas golondrinas,

caen vencidas una y otra vez

como mis lágrimas en esta madrugada fría y desorientada …

 

¡Y duele! ¡duele! ,

este nuevo día que sabe agrio y maldito,

este nuevo día que amanece gris en el infinito

este nuevo día padre

que parece no tener olvido…

 

Recuerdo tu caminar a mi lado

en ese largo camino repleto de emociones,

piedras que me enseñaste a saltar

páginas que escribir, letras que asimilar…

El resplandor de tu mirada 

conversando sobre los primeros versos 

que la vida me brindaría…

Tus mimos al ocaso de cada día

destellos de esperanza en tu palabra

rebozando los deseos en mis ojos de chiquilla

avivándolos de riquezas, de jubilo, de ímpetu.

Tu voz pronunciando mi nombre…

La caricia en mi pelo cada anochecer,

la suave sonrisa que pacificaba mi sed 

tus cabellos blancos perfumados con aroma de azahar…

 

Padre,

los días han caminado deprisa sin ti a mi lado

y a pesar de tu ausencia siempre sentí que caminaba de tu mano

alzando la mirada hacia la cima más alta

donde el camino se pierde donde los sueños son metas por alcanzar…

 

¡Y duele! ¡duele!,

este nuevo día que se torna lánguido y amargo,

duele este día que amanece

y regresa lleno de llanto

avivando las melancolías a su paso .

 

Mo Anam Cara

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