Los días que no madrugo
he sentido en mi piel, al sol que esperaba
paciente, para entregarse a mis células.
Hay días y días,
más sol,solo hay uno llamado astro
las ramas de los naranjos se doblan
tocando al suelo y la tierra mojada huele
en estos dias lluviosos del invierno,
mis pies se entregan cuidadosos
al devenir de mis pasos
y sigo caminando airoso por la senda
del olvido.
Nunca el tiempo es perdido
decía la canción.
¿y yo me pregunto el porque de mis
arrugas?.