Iraultza Askerria

Soneto a una tierra ofendida

Soy el paraíso, el alma que riega
los riachuelos que dulce descienden
por las montañas de cumbres que hienden
la voluntad del cïelo que ciega.

Soy el planeta que amado debiera
por las personas que viven de mí,
y a defenderme bien dice que sí,
mientras me usan cual la basurera.

Mas sin embargo, cercano es el día
en el que vengue su falsa osadía
y de su pueblo no deje señal.

Vientos, tornados, helados inviernos,
fuegos, riadas, veranos, infiernos...
¡hoy sellarán vuestro triste final!

 

Iraultza Askerria

http://iraultzaaskerria.wordpress.com/