Y hoy cumpliste tus primeros diez años
y miserablemente olvidé abrazarte
y dulcemente mimarte...
Y te llevé a tu colegio
y en tus ojitos negros
no logré desentrañar
la personal epopeya
de tus primeros diez años.
Y al enfilar mi coche ráudo
en dirección del trabajo,
me golpeó aquel recuerdo
de tus primeros diez años.
Lamenté tal desventura
de olvidar tu onomástico,
y lloré con amargura
mientras iba así en mi carro.
Arrepentido quisiera
oh "muchachito milagro",
que perdones mi descuido
y me brindes tu cariño
al cumplir estos diez años.
R. Gruger / 5-2-85
Al "Benjamín" de mis hijos.