Son los pasos largos y cansados
los que duelen,
los que caminan solos por las calles empedradas.
Son los pasos largos y cansados
los que se marchan,
y se despiden una vez más del camino.
Son los pasos largos y cansados
los que no quieren avanzar,
ya no quieren correr.
Son los pasos largos y cansados
los que no quieren caminar,
y tampoco tropezarse más en fango.
Son los pasos largos y cansados,
lo que ya no rinden a los pisotones de los demás.
Son los pasos largos y cansados,
los que hoy quieren descansar, para mañana avanzar.
—Edy Yax.